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Explora París: Imprescindibles y Direcciones que No Te Puedes Perder

París. Su nombre evoca instantáneamente el estilo, la cultura, la gastronomía y la historia. Pero ante tantas posibilidades, una pregunta surge constantemente: ¿dónde ir en París para disfrutar plenamente de la Ciudad de la Luz? Ya seas amante del arte, entusiasta de la arquitectura, apasionado de paseos o simple curioso de paso, esta selección actualizada para 2025 te guiará a través de los sitios emblemáticos, los barrios vibrantes, los tesoros escondidos y las experiencias que no te puedes perder. ¡Sigue la guía!
Actualizado el
Eric RENAUD
Arco de Triunfo, París

La Torre Eiffel: Símbolo emblemático de París

Imposible abrir esta guía sin comenzar por la que el mundo entero nos envidia: la Torre Eiffel. Construida para la Exposición Universal de 1889, domina la capital desde sus 330 metros de altura. De día y de noche, su silueta de hierro es un referente tanto visual como emocional para todos los amantes de París.

Sube a su cima para disfrutar de una vista panorámica impresionante de los techos parisinos. Abajo, las praderas del Campo de Marte ofrecen uno de los mejores lugares para un picnic o una sesión de fotos icónica, especialmente cuando el sol brilla. Es uno de los sitios más visitados de la lista de monumentos de París, que hay que visitar al menos una vez en la vida.

No te lo pierdas: la iluminación de la Torre cada noche al caer la noche – un momento puro de magia parisina.

El Museo del Louvre: Inmersión en el arte y la historia

Bienvenido al museo de arte más grande del mundo. El Museo del Louvre es mucho más que un simple monumento: es una inmersión total en la historia de la humanidad a través de miles de obras excepcionales.

Desde los jeroglíficos del antiguo Egipto hasta la Victoria de Samotracia, pasando por la Joconda – estrella indiscutible de la casa –, cada sala te transporta a una época, una cultura, un universo. Es un lugar donde el arte trasciende el tiempo, ubicado en el corazón de un antiguo palacio real.

Pero el Louvre también es una experiencia en sí misma: pasear bajo la pirámide de vidrio, admirar las esculturas a la luz natural, o simplemente perderse (voluntariamente) en sus interminables galerías. Y si lo visitas en un día soleado, el cercano jardín de las Tullerías prolonga agradablemente la visita.

Bueno saber: reserva tus entradas con antelación para evitar las colas, especialmente durante los fines de semana largos o las vacaciones escolares.

Conviértete en Viticultor por un Día en el Louvre

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BILLETE EL ARTE DEL VINO EN EL LOUVRE

La Catedral de Notre-Dame: Una obra maestra gótica

A pesar de haber sido marcada por las llamas en 2019, Notre-Dame de París sigue siendo una de las joyas más emblemáticas de la capital. Su poderosa silueta, sus míticas gárgolas, sus majestuosas rosetones: cada detalle de esta catedral gótica cuenta un capítulo de la historia de Francia.

Hoy en día, en plena restauración, el monumento sigue fascinando, atrayendo a miles de visitantes que vienen a presenciar su renacimiento. Puedes admirar la fachada desde el atrio, explorar las calles cercanas y sentir esta atmósfera única que mezcla lo sagrado y la leyenda literaria – Victor Hugo nunca está lejos.

Los andamios no restan nada a su grandeza. Al contrario, son testimonio del apego de los parisinos a este símbolo universal de resiliencia y fe. Los alrededores, como la Isla de la Ciudad o los muelles del Sena, también ofrecen un marco ideal para pasear con tranquilidad.

No te lo pierdas: los conciertos de campanas y la futura reapertura de la nave prevista para diciembre de 2024.

Montmartre y el Sacré-Cœur: Encanto bohemio y vistas impresionantes

Si hay un barrio que encarna el alma artística de París, es sin duda Montmartre. Situado en su colina, este pueblo en la ciudad conserva un espíritu libre y atemporal, entre talleres de artistas, calles adoquinadas y pequeños cafés fuera del tiempo.

En la cima, la basílica del Sacré-Cœur te espera con su brillante cúpula blanca y una de las más bellas vistas panorámicas de París. El interior, pacífico y luminoso, contrasta con la efervescencia de la plaza del Tertre justo al lado, donde pintores y caricaturistas retratan a los transeúntes en un ambiente acogedor.

Luego baja por la rue des Abbesses, haz una parada en el famoso muro de «Te amo» y continúa tu paseo hasta el Moulin Rouge si te apetece. En Montmartre, cada esquina parece contar una historia.

Consejo Come To Paris: visita temprano por la mañana o a última hora de la tarde para disfrutar de la magia del lugar sin la multitud.

Los Campos Elíseos y el Arco de Triunfo: Paseo legendario

Imposible hablar de París sin evocar los Campos Elíseos, a menudo calificada como "la avenida más hermosa del mundo". Bordada de boutiques de lujo, cines icónicos y cafés históricos, esta arteria emblemática conecta la plaza de la Concordia con el imponente Arco de Triunfo, vigilando la ciudad desde la plaza de la Estrella.

Sube los 284 escalones del Arco para disfrutar de una vista espectacular sobre la geometría perfecta de las avenidas parisinas. Desde allí arriba, París se revela en toda su majestuosidad, desde el Louvre hasta La Defensa. El paseo por los Campos, de día como de noche, ofrece una inmersión total en el arte de vivir al estilo parisino, entre elegancia y efervescencia.

Por la noche, la avenida se ilumina y revela otra faceta de la capital, aún más glamorosa. Ya sea para ir de compras, asistir a un desfile o simplemente pasear, la experiencia sigue siendo inolvidable.

Consejo: evita las horas pico para un paseo más tranquilo, y privilegia las pequeñas calles paralelas para descubrimientos sorprendentes.

El Barrio Latino: Corazón intelectual y cultural

Con sus librerías independientes, sus universidades prestigiosas y sus animadas callejuelas, el Barrio Latino encarna el alma erudita de París. Aquí late el corazón de la vida intelectual desde hace siglos, entre la Sorbonne, el Panteón y los famosos cafés que han visto pasar a escritores, artistas y filósofos.

Pasee por la rue Mouffetard, disfrute del ambiente cálido de los mercados, piérdase en las pequeñas callejuelas bordeadas de fachadas coloridas. Los cinéfilos adorarán las salas de arte y ensayo, mientras que los amantes de la historia disfrutarán explorando las arenas de Lutecia o los jardines de Cluny.

Y si busca ideas para pasear por el Barrio Latino, eche un vistazo a esta guía completa sobre el Barrio Latino de París, un compendio de cultura, historia y convivencia en el corazón de la capital.

Imprescindible: una tarde en la terraza de la plaza de la Contrescarpe, entre una copa de vino y un debate apasionado.

Un país, mil maravillas: explora Francia

El Palacio de Versalles: Esplendor real cerca

A solo 45 minutos de París, el Palacio de Versalles es una escapada imprescindible para quienes sueñan con fastos reales y jardines al estilo francés. Antiguo residencia de Luis XIV, esta obra maestra de la arquitectura y la historia fascina tanto por su magnificencia como por la riqueza de sus decoraciones.

La Galería de los Espejos, verdadero joya de espejos y dorados, es un momento destacado de toda visita. Pero Versalles también es un inmenso dominio: los jardines diseñados por Le Nôtre, el pueblo de la Reina, el Gran y el Pequeño Trianón... Tanto lugares por explorar a pie, en bicicleta o incluso en barca.

Disfruta de un día soleado para un paseo real y déjate encantar por la magia del lugar. Para planificar tu visita, horarios, entradas e información práctica se pueden encontrar en la página dedicada al Palacio de Versalles.

Consejo Come To Paris: reserva tu entrada sin colas y llega temprano para evitar la multitud.

Los Jardines de Luxemburgo: Un remanso de paz en plena ciudad

Entre los numerosos espacios verdes de la capital, los Jardines de Luxemburgo ocupan un lugar muy especial en el corazón de los parisinos. Situados entre el Barrio Latino y Saint-Germain-des-Prés, estos jardines al estilo francés son el escenario de un París más lento, más contemplativo.

Sillas verdes de metal, fuentes elegantes, caminos bordeados de estatuas... Todo invita aquí a la relajación. Los amantes de la lectura se instalan a la sombra de los castaños, los niños navegan sus pequeños veleros en el estanque central, mientras que los jugadores de ajedrez disputan partidas acaloradas bajo las pérgolas.

El Palacio de Luxemburgo, sede del Senado, añade un toque solemne a este rincón de verdor. Y cuando las flores están en plena floración, el parque se vuelve simplemente sublime.

Qué hacer: asistir a un concierto gratuito en el quiosco de la música o hacer un picnic en el césped del lado sur, cuando lleguen los días soleados.

El Sena y sus Bateaux-Mouches: Descubrimiento fluvial de París

Navegar por el Sena es una manera única y poética de descubrir París. A bordo de un Bateau-Mouche, todo toma otra dimensión: los monumentos se alinean a lo largo del agua, los puentes se suceden en una coreografía arquitectónica, y la Ciudad Luz revela su mejor perspectiva.

De día como de noche, los cruceros ofrecen un panorama excepcional sobre la Torre Eiffel, Notre-Dame, el museo de Orsay, el Louvre o la isla de San Luis. Algunas paseos fluviales incluso ofrecen cenas o conciertos para una experiencia aún más mágica.

¿Quieres aprovecharlo durante los días soleados? Esta guía sobre qué hacer en París cuando hace buen tiempo recopila las mejores actividades al aire libre, incluidas las cruceros por el Sena, que no te puedes perder bajo ningún concepto.

Pequeño consejo: opta por un crucero al atardecer para ver cómo París se ilumina suavemente, copa en mano.

El Centro Pompidou: Arte moderno y contemporáneo

Imposible de perderse con sus tubos de colores, sus escaleras mecánicas exteriores y su aspecto futurista: el Centro Pompidou destaca en el paisaje arquitectónico parisino. Pero lo que impacta tanto como su estética es la riqueza de lo que contiene.

En su interior, uno de los museos de arte moderno y contemporáneo más grandes de Europa le espera, con obras de Picasso, Kandinsky, Duchamp, o incluso Yayoi Kusama. Las exposiciones temporales, a menudo audaces, atraen a apasionados y curiosos en busca de creatividad pura.

El lugar no se limita a las galerías: también encontrará una biblioteca, actuaciones, un cine experimental, y sobre todo, una vista panorámica impresionante desde el último piso.

No te lo pierdas: las noches del museo y la tienda de diseño, perfecta para encontrar objetos inusuales y artísticos.

El Marais: Barrio histórico y moderno

En la encrucijada de siglos y tendencias, el Marais es sin duda uno de los barrios más cautivadores de París. Entre hoteles particulares, museos íntimos, galerías de arte, tiendas de segunda mano elegantes y concept stores, la atmósfera oscila entre el encanto de lo antiguo y la efervescencia del presente.

Pasea por la rue des Rosiers para degustar la cultura judía ashkenazí, explora la place des Vosges – una de las más antiguas y elegantes de la capital – o piérdete en las callejuelas adoquinadas alrededor del museo Carnavalet. Aquí, cada rincón esconde una dirección secreta o un lugar digno de Instagram.

¿Tienes ganas de descubrir las mejores direcciones y tesoros ocultos? No te pierdas esta guía completa dedicada al Marais en París, perfecta para pasear, ir de compras o brunch como un verdadero parisino.

Ambiente garantizado el domingo, cuando todo el barrio cobra vida alrededor de las terrazas y las brocantes efímeras.

Ruta de las maravillas: vive Francia intensamente

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La Sainte-Chapelle: Joya arquitectónico gótico

Ubicada en la Isla de la Ciudad, a un paso de Notre-Dame, la Sainte-Chapelle es un tesoro a menudo desconocido por el gran público... y, sin embargo, merece una visita por sí sola. Construida en el siglo XIII para albergar las reliquias de la Pasión de Cristo, esta capilla real es una obra maestra del gótico radiante.

Lo que fascina instantáneamente son sus vidrieras espectaculares: 15 ventanales de 15 metros de altura que inundan el espacio con una luz colorida sobrenatural. Cada panel cuenta una escena bíblica con un nivel de detalle asombroso.

Un momento fuera del tiempo, un instante de gracia, una experiencia casi espiritual. Para saber más sobre horarios, tarifas o reservas, descubre la página dedicada a la Sainte-Chapelle de París.

Consejo Come To Paris: privilegia una visita al final del día para disfrutar plenamente de la luz que filtra a través de las vidrieras.

Las Catacumbas de París: Viaje misterioso bajo tierra

¿Listo para cambiar de ambiente? Dirección a las Catacumbas de París, para una inmersión impactante en las entrañas de la capital. A más de 20 metros bajo tierra, se extienden cerca de 2 kilómetros de galerías donde reposan los restos de más de seis millones de parisinos.

Adaptadas a finales del siglo XVIII para descongestionar los cementerios, las Catacumbas ofrecen hoy una visita a la vez histórica, fascinante y ligeramente perturbadora. La atmósfera es única: fresca, silenciosa, casi irreal. Las paredes adornadas con cráneos y tibias son testigos de una época en la que la muerte formaba parte del día a día urbano.

Es uno de los sitios más inusuales de París, recomendable para los amantes de lugares fuera de lo común o para los apasionados de la historia subterránea.

Consejo: dado que los lugares son limitados, es mejor reservar la visita con antelación, especialmente los fines de semana o durante las vacaciones.

Disneyland París: Magia para pequeños y grandes

¿Deseas un descanso encantado lejos de la agitación urbana? Dirígete a Disneyland París, el universo donde los sueños cobran vida. A solo 35 minutos del centro de París en RER o autobús, este parque de atracciones de renombre mundial deleita tanto a los niños como a los adultos nostálgicos.

Dos parques temáticos te esperan: el Parque Disneyland, con su icónico castillo, sus tierras inmersivas y sus espectáculos impresionantes, y el Parque Walt Disney Studios, centrado en los entresijos del cine, los superhéroes de Marvel y el universo de Pixar. Montañas rusas, desfiles de ensueño, fuegos artificiales... cada momento está pensado para hacer brillar los ojos.

Ya sea para un día o una estancia prolongada, Disneyland sigue siendo una de las mejores ideas de salida en París y sus alrededores para vivir una aventura inolvidable.

No te lo pierdas: la nueva zona "World of Frozen" esperada para principios de 2025, para prolongar la magia en el reino de Arendelle.

La Defensa: Modernidad y arquitectura futurista

A menudo ignorada por los visitantes en busca de encanto clásico, La Defensa merece sin embargo la visita. Barrio de negocios por excelencia, también es una vitrina de la arquitectura contemporánea al aire libre, salpicada de rascacielos, amplias explanadas y obras de arte monumentales.

El parvis de La Defensa, completamente peatonal, ofrece una perspectiva única sobre el eje histórico que va del Arco de Triunfo a la Gran Arco. Allí se descubre otra faceta de París: más ambiciosa, más vertical, más visionaria. Es el lugar ideal para una sesión de fotos urbana o un paseo moderno fuera de los caminos trillados.

Para los amantes del arte público, del diseño brutalista o simplemente de ambientes inusuales, es un excelente complemento a los clásicos parisinos.

Qué hacer: subir a la cima de la Gran Arco para una vista espectacular de París y sus alineaciones perfectas.

Los mercados parisinos: Sabores locales y artesanía

Para probar el verdadero París, nada como un paseo por uno de sus mercados. Aquí, se viene a hacer la compra, por supuesto, pero también para charlar con los productores, oler los aromas de pan caliente, elegir el queso del domingo o encontrar un hermoso ramo de flores.

Cada barrio tiene su ambiente: el mercado de Aligre por su efervescencia popular, el mercado de los Niños Rojos por su encanto discreto y sus puestos cosmopolitas, el mercado biológico Raspail para los amantes de productos sanos y éticos. Frutas llenas de sol, especias raras, ostras frescas o telas coloridas… es una explosión de colores y sabores.

También es la ocasión de conocer a los parisinos en su vida cotidiana, lejos de las grandes marcas y del turismo clásico.

Consejo Come To Paris: ve por la mañana, temprano, para disfrutar de los mejores hallazgos… y por qué no improvisar un picnic parisino.

Mercados al aire libre

Los pasajes cubiertos: Compras a salvo de las inclemencias

Verdaderas galerías del tiempo, los pasajes cubiertos de París ofrecen una experiencia fuera de lo común, entre el encanto de antaño y la elegancia discreta. Construidos en su mayoría en el siglo XIX, eran los centros comerciales de la época, protegidos de la lluvia, el ruido y la multitud.

Hoy en día, son verdaderos remansos de paz en el corazón de la ciudad, donde se pasea entre librerías antiguas, boutiques de diseñadores, salones de té confidenciales y galerías de arte. Entre los más emblemáticos: el pasaje de los Panoramas, la galería Vivienne o el pasaje Jouffroy, con su decoración de vidrio y hierro forjado.

En invierno como en verano, es un paseo romántico e inspirador, perfecto para hacer window shopping o simplemente redescubrir París de otra manera.

Qué hacer: detenerse en un café retro y observar el discreto ballet de los amantes de los objetos bellos.

Los cafés y cervecerías: Pausa gourmet a la parisiense

Imposible imaginar una estancia en París sin sentarse en la terraza de un café o de una cervecería. Más que un simple lugar para alimentarse, es un arte de vivir, un teatro cotidiano donde se cruzan conversaciones apasionadas, miradas furtivas y pequeños placeres dulces.

Pida un café crema mientras observa el ballet urbano, deguste un plato de quesos bien curados, o déjese tentar por una sopa de cebolla o un steak-frites, según la hora y el humor. Cada establecimiento tiene su alma: desde el mítico Café de Flore hasta el zinc de barrio aún desconocido, la experiencia sigue siendo auténtica.

También es el lugar ideal para empaparse de la atmósfera local, hojear un periódico o simplemente... no hacer nada. Porque en París, tomarse su tiempo alrededor de un espresso es una forma de poesía.

No te lo pierdas: el aperitivo en la terraza al atardecer, con una copa de vino y una tabla para compartir. El sabor de París, simplemente.

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